Camina entre miradas de odio y repudio, siente como toda la gente que lo ve lo desprecia, ve en sus caras la repulsión que su apariencia les causa; La música en sus oídos atenúa los murmullos y las burlas, sabe que esos desconocidos no le conocen que ellos no saben quién es él, algunos se burlan de su ropa otros de sus símbolos, todos le temen porque es diferente, y lo único que saben es odiar lo que no conocen, camina por la calle hasta que una luz roja los detiene, ellos cruzan sin precaución omitiendo la señal de advertencia él piensa “Por eso estamos como estamos el rojo es para que se detengan no para que corran como animales asustados”. Ahora hay mucha gente a su rededor nadie lo topa todos se alejan lo más posible de él, cierra sus ojos.
A su derecha escucha “Por eso es que estamos mal porque estos jóvenes no respetan a Dios, si este chico parece que fuera enterrador” – hoy ha sido un día malo, su pareja le pidió tiempo por chat no se atrevió a decírselo en persona, su trabajo fue duro y difícil, su almuerzo no mejoró las cosas: la niña que atendía su restaurant favorito demostró toda la ineptitud del mundo al no poder servirle la orden como él la deseaba, la tarde empeoró aún más, por un cambio en otro departamento dos semanas de trabajo se fueron a la basura, respiro se fumo un tabaco tomo un poco de café y siguió trabajando sobre los cambios, pero ya a estas horas de la noche su paciencia había llegado al límite; ¿Que sabia esa anciana tonta sobre él? Ella no tenía una idea de la relación que el tenia con Dios. ¿Que sabía toda esa gente sobre él? Solo porque era mucho más grande que ellos y vestía de negro chaqueta de cuero cadena en la billetera y tenia símbolo que ellos no entendían lo odiaban, siempre detesto la estupidez y la ignorancia y en este momento estaba rodeado de ella.
“Claro y lo peor es que esta puesto esas tonteras en las orejas y ni siquiera escuchan al resto son el colmo” – fue la gota que derramo el vaso abrió los ojos giro hacia ella, se agacho hasta poderla mirarla con ojos llenos de fuego y odio desenfrenado, mientras disfrutaba del pánico que veía en lo profundo de los ojos de ella dijo - “No señora oigo todas las cosas que ha dicho y sí estoy vestido para un funeral, para el suyo” – Tomo su cabeza entre sus inmensas manos y la estrello contra su rodilla, su sangre lleno su ropa de un rojo oscuro cual noche, antes que la señora de alado pudiera reaccionar, la tomo del cuello y trituro su tráquea entre su mano izquierda mientras la miraba a los ojos “Debería aprender a no hablar mal de otras personas” , una vez que sintió que aquella vida se extinguió entre sus dedos vio como la masa trataba de capturarlo, aquella gente quería matarlo, pero él no tenía miedo a eso, se abalanzo sobre ellos cual lobo rabioso, al primero al que le cayó encima lo golpeo con tal furia que había astillas de sus huesos en sus nudillos cada golpe que le propinaba era lujuria para él, se reía cada vez más fuerte la gente cambio su furia por miedo, todos los golpes que le había propinado parecían no funcionar, una vez acabado con su tercera presa miro al tumulto con su rostro lleno de gotas de sangre con las dos manos goteando sangre murmuro “Quien es el siguiente, todos o uno solo, no me importa todos van a morir; ¿Cuantos de ustedes me llevare hoy al infierno conmigo?” y de su garganta salió algo que más parecido a un locura que a una risa, el tumulto se disolvió y corrían pidiendo auxilio llenos de pánico y miedo, se levanto miro lo que había a su rededor, en el fondo una patrulla encendió su sirena, el comenzó a caminar lento hacia ella - “La diversión acababa de comenzar”.
Un golpe en la espala le obligo a abrir sus ojos, la luz estaba en verde y la gente caminaba a su rededor, lo miraban como si estuviera loco, respiro profundo cambio de canción y siguió caminando mientras murmuraba para sí mismo “Estos infelices no saben de la que se han salvado, a veces tengo miedo de lo que pienso, necesito un trago para calmarme.”
1 comentario:
La gente no entiende lo que somos, lo que realmente somos, faltos de inteligencia, faltos de mirada, faltos de respeto hacia ellos mismos y hacia nosotros.-
"Le temes a lo que no entiendes" es un gran refrán que se utilizo hasta en los gremios religiosos mas grandes.-
El miedo es respeto, y la furia el arma con la que caminas todos los días.-
Muy buen post pana
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