martes, diciembre 02, 2008

Sacadme de mi

Una dulce figura esbelta y hermosa a mí se acerca,
a través de sus hermosos mantos nada se distingue,
se dirige a mí con decidido y fuerte paso,
se acerca y sobre mi triste figura se inclina,
su tersa mano toca mi vacio rostro,
gira con enérgico movimiento mi cabeza hacia la suya,
miro sus en el interior de sus hermosos ojos,
la llama del deseo dentro de ellos arde,
la soledad y el dolor oscurecen los míos,
su rostro al mío de a poco se acerca,
la niebla de la esperanza de sus carmesí labios brota,
el mundo se oscurece mientras ella se acerca,
el temor de sus labios me despierta,
su esperanza se suela por mis labios,
su deseo llena mis pupilas,
me pierdo en un beso que me devuelve la vida,
entre mis frías manos tomo tu cálido rostro,
ella de a poco se aleja, yo de a poco me acerco,
levanta mi cuerpo mi alma mi vida,
de mi se separa tiernamente,
me dice al oído te amo,
dulcemente toma mi mano,
hacia el exterior me guía,
a un nuevo mundo ella me guía.

1 comentario:

Unknown dijo...

Muy logrado el poema. Combinar el deseo y el amor que provoca esa mujer elegida con la propia oscuridad que te caracteriza, no cualquiera lo logra, y eso es lo que separa al que es del que sólo queda como POSER.
Un abrazo, mi demonio estimado.